La primera semana de mayo, colmada de “mítines” detonó entre el 4 y 5 de mayo de 1886, en donde la policía comenzó a responder con brutalidad hacia los huelguistas, asesinando e hiriendo a multitudes, y finalmente, encarcelando a los famosos “Mártires de Chicago”, que luego fueron enjuiciados y ejecutados por su participación en las huelgas de la primera semana de mayo.
Nos hacemos eco de ese evento, como trabajadores no podemos ignorar esa tragedia que cobró vidas en pos de una lucha legítima por los derechos más elementales.